OrgoChakra Corazón o Cardíaco con forma Semicirculo colgante o llavero 15 gr.
- Cobertura de 2 metros de radio X 2 metros de altura.
- Diámetro.- 3,7 cm.
- Grosor.- 0,5 cm.
- Peso.- 15 gr.
Las OrgoChakras están elaboradas como el resto de nuestras Orgonitas, con sus proporciones al 50 % viruta de aluminio, 50 % resina y cuarzo en su interior.
Se diferencian del resto por su color. Se utilizan pigmentos naturales de un mineral, nunca utilizamos colorantes de resina, que llevan alcohol.
¿Qué son los chakras? Los chakras son los centros energéticos que tenemos en nuestro cuerpo, ellos son los encargados de que la energía fluya libremente por todo nuestro cuerpo áurico y lo revitalicé.
Con el estrés, pensamientos y vivencias negativas, los chakras pueden bloquearse (ya que los chakras están ligados con nuestras emociones). Abrir los chakras y activarlos, es algo que podemos aprender para sentirnos más sanos y felices.
Cada chakra se relaciona con ciertas emociones determinadas, con un color específico, y tiene órganos y glándulas a su cargo.
Es el cuarto chakra se llama Anahata, también es llamado “Chakra corazón” o “chakra cardíaco” por su ubicación, justo en el medio del pecho.
Controla diversas partes del cuerpo como el sentido del tacto, el sistema circulatorio, y órganos como el corazón y pulmones.
Se relaciona con todo lo referido al corazón y los afectos 
el perdón, el amor y la compasión.
Los principales síntomas de un chakra cardíaco bloqueado serían: enfermedades del corazón y respiratorias, incapacidad para amar, egoísmo, aislamiento…
De todos es sabido la energía Orgón, ahora sumada a los Chakras, para poder trabajar cada zona de nuestro cuerpo.
¿Qué son las Orgonitas?
Resumidamente son Filtros de energía electro-magnética que atrapan y anulan la energía que entra dañina (también denominada D.O.R.) y es convertida en energía positiva por medio de la piezoelectricidad (conjunto de fenómenos eléctricos que se manifiestan en algunos cuerpos sometidos a presión u otra acción mecánica) del cuarzo o turmalinas.
El Dr. Wilhelm Reich es el punto de referencia en este campo quien estudió la energía presente en la naturaleza, y que él bautizó como “ORGON”. Una energía que no es ni eléctrica ni magnética pero que aunque no es visible al ojo humano sin embargo si se nota su efecto por estar en contacto permanente con la vida, teniendo suma afinidad con los estados líquidos de la materia (H2O). Sí se sabe que emite un color azulado, atraviesa cualquier material, es una energía radiante de fondo, de punto cero. Sabemos que la energía ORGÓN se manifiesta mediante pulsaciones de 2 ciclos: la expansión y la contracción presente en todo el ciclo de la vida.
¿Cómo funcionan?
En primer lugar hay que aclarar que una orgonita en si misma No es un acumulador de energía ORGÓN. Hay dos tipos de energías: una positiva, que es energía ordenada, como la energía natural del medio ambiente; y otra negativa, que es esta energía excitada por las radiaciones electromagnéticas provenientes de torres de alta tensión, celulares, televisores, computadoras, microondas, etc. Las personas también influencian el orgón ambiental mediante sus estados de ánimo y emociones.
Funciona de la siguiente manera: La resina atrae el D.O.R. (se produce con la conglomeración de Torres de Antenas, TV, Radio…) del ambiente y lo almacena, como una esponja, mientras que el metal tiende a a traerlo y repelerlo simultáneamente. Ésto crea un estado caótico en el interior del dispositivo, las moléculas se mueven en todas direcciones al mismo tiempo, y cuando dicha energía negativa sale de aquel, expulsada por el metal a través de la resina, lo hace de manera ordenada, dado que esta unida es una sustancia cristaloide – un cristal es por definición, una forma ordenada, y por eso la energía caótica se ordena al pasar a través del cuarzo por tener este la capacidad piezo eléctrica; o capacidad de producir electricidad cuando es sometido a una presión (vibración). Cuando se incluye en una matriz orgánica (desde azúcar a polímeros) en presencia de virutas de metal, es capaz de actuar como un elemento electro modulador o estabilizador. Algo así como un filtro para todo tipo de radiaciones. La resina retiene ésta energía en el interior, facilitando al cuarzo hacer su trabajo. Es entonces cuando el cuarzo comprimido por la resina, genera un flujo de electrones (cualidad piezoeléctrica) que se suman a la onda desvitalizada, convirtiéndola en energía positiva o P.O.R.
El cuarzo posee un efecto resonante, que nos devuelve y rememora la frecuencia de alineación terrestre, como si dispusiéramos de un afinador de nuestro campo energético.
Es por lo tanto que las orgonitas pueden ser consideradas como “filtros de energía” o “transmuta-dores de energía negativa en positiva”.
Las (orgonitas) nos ayudan a librarnos de la nociva energía producida por los dañinos aparatos electromagnéticos y por estados de ánimo conflictivos. Es bien conocido que gran número de patologías que se diagnostican hoy en día, muchas de las cuales son articulares, se deben en buena medida a la disminución progresiva del campo magnético terrestre y a la contaminación electromagnética que sufrimos, además del actual estilo de vida de la sociedad.
Por lo tanto la “orgonita” aprovecha los últimos avances de la física orgónica, pudiendo atrapar las energías negativas en lugar de que recibamos todo su potencial no vivo para nuestra salud.
La orgonita natural es una herramienta muy poderosa para revertir la contaminación en la atmósfera, suelo y especialmente en el agua.
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